Sevilla
Es una ciudad que enamora a primera vista.
Una ciudad embriagadora, que invita como pocas a caminarla, a recorrerla en bici o montados en carruajes tirados por caballos, porque ella es así, apasionada, divertida, chistosa, llena de gentes maravillosas. Cuna de humoristas, bailaores de flamenco, poetas, toreros... Ellos saben bien lo que es "el arte de vivir sonriendo".
Siempre hace sol y buen tiempo, además tiene el casco histórico más extenso de España y uno de los tres más grandes de Europa, y por supuesto todas sus calles terminan en una cervecita. Con la catedral gótica más grande del mundo, y el Álcazar donde se rueda Juego de Tronos, o la Plaza de España por donde paseo la Reina Amidala en Star Wars, esta ciudad es un escenario de cine hecho realidad.
Huele siempre a jazmín o naranjo en flor. Y lo primero que captará vuestra atención es el color de sus trajes de flamenco, peinetas y mantones de Manila. El de sus geranios multicolor asomando curiosos por los barrotes de sus balcones, y el color también de sus claveles engalanando carruajes.
Desde allí, visita Granada, La Joya Mora, situada a los pies de la elevada Sierra Nevada, donde se encuentra uno de los palacios más admirados del mundo, la Alhambra, con sus impresionantes jardines del Generalife.
O escápate a Córdoba, la que fue durante largo tiempo la emblemática capital del mundo islámico español, conserva aún monumentos de excepcional importancia, como la Mezquita, extraordinario templo islámico; encantadoras callejuelas y las importantísimas ruinas de Medina Azahara.
